¿Cuál es la diferencia entre ERTE y ERE?

España cuenta con un sistema de regulación de empleo que le permite a los trabajadores tener protección laboral. Esto incluye el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) y el Expediente de Regulación de Empleo (ERE).

Un ERTE se aplica cuando una empresa se enfrenta a circunstancias excepcionales, como una crisis económica, y no puede mantener el nivel de empleo habitual. Esto le permite a la empresa temporalmente reducir el número de horas de trabajo o suspender temporalmente el contrato de los empleados. Los empleados afectados reciben un subsidio por desempleo mientras se aplica el ERTE.

Por otra parte, un ERE se aplica cuando una empresa desea reducir el número de empleados de forma permanente. Esto se hace para reducir los costos y aumentar la productividad. Los empleados afectados por el ERE reciben una indemnización.

En resumen, un ERTE se usa para reducir temporalmente el número de horas de trabajo o suspender temporalmente el contrato de los empleados, mientras que un ERE se usa para reducir el número de empleados de forma permanente. Estas medidas tienen diferentes consecuencias para los empleados, ya que los afectados por el ERTE reciben un subsidio por desempleo, mientras que los afectados por el ERE reciben una indemnización.

¿Cuál es la diferencia entre ERTE y ERE?

España es uno de los países europeos con una legislación laboral particularmente estricta, lo que significa que los empleadores deben conocer las diferencias entre los dos términos más comunes relacionados con el despido laboral: ERTE y ERE.

Un ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo) es una medida temporal que se puede tomar cuando una empresa atraviesa una crisis temporal y necesita reducir temporalmente el número de empleados. Esta regulación temporal se aplica a todos los trabajadores, sin necesidad de que haya una desigualdad entre ellos. El ERTE puede ser parcial o total, y puede durar hasta un año.

Un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) se aplica cuando una empresa quiere cerrar una planta o cerrar una sección entera de la empresa. Esta regulación se aplica a un número limitado de trabajadores que se seleccionan con criterios específicos. El ERE puede durar hasta dos años.

En resumen, el ERTE se aplica cuando una empresa necesita reducir temporalmente el número de empleados y el ERE se aplica cuando una empresa quiere cerrar una planta o una sección entera de la empresa. Ambos tienen diferentes duraciones y se aplican a diferentes grupos de trabajadores.

¿Cuándo se puede hacer un ERE después de un ERTE?

Los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) son un conjunto de medidas con el fin de regular la relación laboral entre un trabajador y un empleador. Estos se realizan en caso de que el empleador desee realizar una reducción de su plantilla de trabajadores, normalmente por motivos económicos o de producción. El ERE puede ser colectivo o individual, según el número de trabajadores afectados.

En España, los ERE se pueden realizar después de un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) siempre y cuando se cumplan una serie de requisitos. Estos requisitos dependerán de la razón por la cual se ha realizado el ERTE. Si el ERTE se ha realizado por una causa económica o productiva, el ERE se podrá realizar una vez hayan transcurrido los seis meses de duración del ERTE. Por otro lado, si el ERTE se realizó por causas de fuerza mayor, el ERE se podrá realizar una vez hayan pasado los doce meses de duración del ERTE.

Es importante tener en cuenta que el ERE debe de ser justificado por motivos económicos o de producción. Además, debe de estar aprobado por la autoridad laboral correspondiente. Si no se cumplen estas condiciones, el ERE será ilegal.

En resumen, los ERE se pueden realizar en España después de un ERTE siempre y cuando se cumpla una serie de requisitos y se respete la legislación laboral.

¿Cuánto se cobra por un ERE?

En España, un ERE, o Expediente de Regulación de Empleo, es un mecanismo por el que se puede despedir a los trabajadores. Puede ser usado para cerrar una empresa, reducir la plantilla de trabajadores, o adaptarse a la situación económica. Estos despidos no son gratuitos, y los trabajadores deben ser compensados adecuadamente por sus años de servicio. La cantidad exacta que se cobra por un ERE depende de una variedad de factores, como el tiempo de servicio, la edad del trabajador, el salario, entre otros.

El importe mínimo que se debe pagar a un trabajador despedido es de 33 días de salario por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades. Esta compensación debe ser pagada por la empresa o el empresario, a menos que se haya acordado otra forma de compensación. Por ejemplo, un trabajador que lleve trabajando 10 años en la misma empresa recibirá una indemnización de 330 días de salario, a menos que se acuerde una indemnización superior.

Además, el trabajador también puede recibir beneficios adicionales como el pago de la prestación por desempleo, el pago de la cotización a la seguridad social, y una indemnización por los días de vacaciones no disfrutados. Los trabajadores también pueden recibir otras compensaciones por los años trabajados, como una indemnización por antigüedad, o una indemnización por despido improcedente. En algunos casos, los trabajadores también pueden recibir una indemnización por el tiempo de servicio.

En conclusión, la cantidad exacta que se cobra por un ERE depende de una variedad de factores, como el tiempo de servicio, la edad del trabajador, el salario, entre otros. El importe mínimo estipulado es de 33 días de salario por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades, además de otros beneficios como el pago de la prestación por desempleo, el pago de la cotización a la seguridad social, y una indemnización por los días de vacaciones no disfrutados.

¿Qué pasa cuando te hacen un ERE?

Un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) es un instrumento legal que las empresas utilizan para despedir a un número significativo de trabajadores. En España, este procedimiento se rige por la Ley de Seguridad Social número 45/2002 y la legislación laboral específica de cada región. El ERE se realiza para reducir el tamaño de la plantilla laboral de una empresa en momentos de crisis económica, recesión o cambio de modelo de negocio.

Cuando una empresa decide realizar un ERE, debe notificarlo a la Autoridad Laboral con una antelación mínima de 15 días. El empleado que se ve afectado tiene derecho a recibir una indemnización por el despido, además de otros beneficios como el paro o la formación profesional. El importe de la indemnización depende del tiempo de antigüedad en la empresa y de los salarios percibidos durante el último año de trabajo.

Los trabajadores afectados por un ERE tienen derecho a negociar con la empresa la mejor solución para ambas partes. Esto incluye la posibilidad de una reubicación interna, una reducción temporal de jornada, un cambio en la categoría profesional, la extinción del contrato, etc. Si el trabajador acepta una propuesta de la empresa, el ERE se considerará rescindido y el trabajador recibirá una indemnización en función de los acuerdos alcanzados.

En España, la Ley de Seguridad Social garantiza el derecho de los trabajadores afectados por un ERE a recibir una indemnización y la ayuda necesaria para superar la situación. Aunque un ERE puede ser una situación difícil para cualquier trabajador, es importante recordar que existen opciones y ayudas para superar este momento.