¿Cuántos días te pertenecen por despido improcedente?

Un despido improcedente es cuando un empleador termina el contrato de trabajo de un empleado sin una causa justificada. Si usted ha sido despedido de manera improcedente, tiene derecho a reclamar una indemnización por despido. El monto de la indemnización se basa en el salario que usted percibía, y el número de años que llevaba trabajando para la empresa.

¿Qué es un despido improcedente?

Un despido improcedente es cuando un empleador finaliza el contrato de trabajo de un empleado sin una causa justificada. Si usted ha sido despedido de manera improcedente, tiene derecho a reclamar una indemnización por despido. El monto de la indemnización se basa en el salario que usted percibía, y el número de años que llevaba trabajando para la empresa.

¿Cuánto dinero puedo reclamar?

El monto de la indemnización por despido improcedente se basa en el salario que usted percibía, y el número de años que llevaba trabajando para la empresa. Si usted trabajaba para la empresa por menos de un año, usted puede reclamar el equivalente a un mes de salario. Si usted trabajaba para la empresa por más de un año, usted puede reclamar el equivalente a dos meses de salario.

¿Cómo puedo reclamar mi indemnización?

Usted puede iniciar una demanda por despido improcedente en la Oficina de Reclamaciones Laborales. Para hacerlo, usted debe llenar un formulario de solicitud y presentarlo, junto con todos los documentos relevantes, a la oficina. Si usted no está seguro de cuáles son los documentos necesarios, usted puede solicitar una lista de los mismos en la oficina. Una vez que se reciba su solicitud, se le asignará un inspector de reclamaciones laborales, quien investigará su caso.

Si el inspector de reclamaciones laborales determina que usted ha sido despedido de manera improcedente, usted tendrá derecho a una indemnización. La indemnización se pagará en un plazo de 30 días, a menos que la empresa decida apelar la decisión. Si la empresa decide apelar, usted deberá esperar a que se resuelva el recurso antes de recibir su indemnización.

¿Cuántos días me tocan por despido improcedente?

En España, el despido improcedente es aquel que se realiza sin causa justificada y, por lo tanto, es nulo. Si has sido objeto de un despido improcedente, tienes derecho a percibir una indemnización por despido.

¿Cuál es el importe de la indemnización por despido improcedente en España? Pues bien, en la sentencia XXX XXX XXX del Tribunal Supremo se estableció que el despido nulo supone una violación del derecho fundamental al trabajo y, por lo tanto, se debe indemnizar al trabajador con 33 días de salario por año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades.

No obstante, en la actualidad existe una propuesta de reforma laboral que establece que el importe de la indemnización en el caso de despido improcedente será de 20 días de salario por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades. Esta nueva normativa aún no ha sido aprobada, pero es importante que tengas en cuenta que, en caso de que se apruebe, sólo se aplicará a los despidos producidos a partir de su entrada en vigor.

¿Qué pasa si un despido es improcedente?

Un despido improcedente es aquel en el que la persona que lo recibe no ha cometido ninguna falta grave para justificar su salida del trabajo. En estos casos, el trabajador puede acudir a un juzgado para que le declare la nulidad del despido y, por tanto, le reinstale en su puesto de trabajo o le abone la indemnización que le correspondería por despido improcedente.

Para que un despido sea considerado improcedente, debe haberse producido por una causa no prevista en el artículo 55 del Estatuto de los Trabajadores, que enumera una serie de faltas graves cometidas por el trabajador que pueden dar lugar a un despido. Entre estas faltas se encuentran:

• La violencia contra el empresario u otros trabajadores.
• La negativa a prestar el servicio por motivos no justificados.
• La difusión de rumores o informaciones falsas que puedan perjudicar al empresario.
• La obstrucción a las labores de organización o control de la empresa.
• El incumplimiento de las obligaciones derivadas del contrato de trabajo.
• La falta de lealtad a la empresa, como, por ejemplo, la revelación de secretos de la misma.

Cabe destacar que, aunque el Estatuto de los Trabajadores recoge una serie de faltas graves que pueden dar lugar a un despido, no se trata de una lista cerrada, sino que el juez es quien tiene la última palabra a la hora de determinar si una falta es grave o no.

En el supuesto de que el despido no se ajuste a lo establecido en el artículo 55 del Estatuto de los Trabajadores, el trabajador podrá acudir al juzgado para que se declare la nulidad del despido y, en consecuencia, se le reinstale en su puesto de trabajo o se le abone la indemnización que le correspondería por despido improcedente.