¿Qué es un contrato de puesta a disposición?

¿Qué es un contrato de puesta a disposición?

Un contrato de puesta a disposición (PAD) es un acuerdo mediante el cual una persona física o una entidad pública se compromete a poner a disposición de otra persona física o entidad pública, durante un determinado periodo de tiempo y a cambio de una retribución, los servicios de un profesional o trabajador autónomo.

Los contratos de puesta a disposición se regulan en el artículo 15 bis del Estatuto de los Trabajadores, que establece que el contrato de puesta a disposición debe ser por escrito y debe contener, como mínimo, la identificación de las partes, la descripción de la prestación a realizar, el importe de la retribución y el plazo de duración del contrato.

El contrato de puesta a disposición es una figura muy utilizada en el sector público para la contratación de personal cualificado, ya que permite contratar a un profesional o trabajador autónomo para que preste sus servicios en una entidad pública durante un determinado periodo de tiempo, sin que exista una relación laboral entre el prestador de servicios y la entidad pública.

La contratación mediante un contrato de puesta a disposición es una modalidad de contratación muy utilizada en el sector público, ya que permite contratar a un profesional o trabajador autónomo para que preste sus servicios en una entidad pública durante un determinado periodo de tiempo, sin que exista una relación laboral entre el prestador de servicios y la entidad pública.

En el contrato de puesta a disposición se establece una retribución por los servicios prestados, que se abonará por horas o por días de trabajo realizados. En el caso de que se contrate a un trabajador autónomo, la retribución se establece en función de los resultados obtenidos.

El contrato de puesta a disposición tiene un plazo de duración determinado, que no puede exceder de tres años. No obstante, el contrato puede prorrogarse por acuerdo de las partes, siempre que no se supere el plazo máximo de tres años.

El contrato de puesta a disposición es una figura muy utilizada en el sector público para la contratación de personal cualificado, ya que permite contratar a un profesional o trabajador autónomo para que preste sus servicios en una entidad pública durante un determinado periodo de tiempo, sin que exista una relación laboral entre el prestador de servicios y la entidad pública.

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