¿Cómo cesa un funcionario interino?

Los funcionarios interinos son aquellos que, aunque cumplen funciones de algún cargo público, no forman parte de la plantilla de la administración. Esto significa que su vinculación es temporal y no tienen los mismos derechos que los funcionarios de carrera.

La duración de un contrato interino varía en función del cargo que tenga el funcionario: ofertas de carácter temporal, como por ejemplo, sustituciones por baja por enfermedad, maternidad o excedencia, por la que se cubren puestos de trabajo por un periodo de tiempo determinado.

Por lo general, el funcionario interino cesa cuando se acaba el período previsto en el contrato, aunque también puede llegar a su fin por otros motivos, como la finalización anticipada del contrato, el cambio de la situación que le motivó, la consolidación de una baja, la aprobación de una oferta de empleo público, la concesión de una excedencia, etc.

En cualquier caso, la cesación de un funcionario interino se comunica oficialmente a través del Boletín Oficial del Estado (BOE) o del Boletín Oficial de la Comunidad Autónoma correspondiente.

¿Cómo es el trabajo de un funcionario interino?

Según el Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) el personal interino es aquel que realiza la actividad profesional de un funcionario de carrera. Cuando una persona piensa en opositar siempre se imagina consiguiendo ese trabajo que lo será para toda la vida, pero no todos los funcionarios empiezan a trabajar para la administración como funcionarios de carrera (es decir, con un puesto en propiedad) sino que muchas veces la relación con la administración es también temporal.

Sin duda, el poder empezar a trabajar como funcionario interino puede ser un buen comienzo ya que te da experiencia (a la vez que percibes una retribución) y esa experiencia puede puntuar y ser decisiva en otros procesos selectivos, pero desde nuestro punto de vista: no hay que perder de vista que el objetivo final sigue siendo conseguir una plaza fija de por vida y eso solo se consigue siendo funcionario de carrera. 

El funcionario interino se encarga de trabajar en la unidad administrativa donde haya sido su nombramiento o en otras unidades en las que realice tareas semejantes.

¿Cómo cesa un funcionario interino?

Un funcionario interino es un trabajador que desempeña un puesto temporalmente, bajo la forma de una sustitución o una ampliación de plantilla. Esto significa que cesará cuando el puesto deje de ser temporal. En España, un funcionario interino cesa cuando el puesto deja de ser temporal, es decir, cuando el puesto se cubre por un funcionario de carrera o se extingue. Esto se realiza a través de una resolución publicada en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

La resolución incluye el nombre y los apellidos del funcionario interino y su cese, deberá ser aprobada por el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, que es el organismo encargado de la gestión del funcionariado interino. Además, el Ministerio también es el encargado de tramitar la resolución de cese de los funcionarios interinos y una vez aprobada la resolución, el funcionario interino deberá presentarla al Ministerio para que sea tramitada. El Ministerio llevará a cabo los trámites necesarios para hacer efectivo el cese del funcionario interino. Tras los trámites necesarios, el funcionario interino quedará desvinculado del puesto y no podrá volver a ocuparlo.

¿Cuando te pueden despedir con un contrato de interinidad?

En España, un contrato de interinidad se puede utilizar para despedir a un trabajador. Estos contratos se utilizan cuando una empresa necesita reducir su plantilla y reacomodar el trabajo. En este caso, el trabajador es despedido y se le ofrece un nuevo contrato temporal. El contrato de interinidad es temporal y debe durar entre uno y seis meses y el trabajador puede recibir una indemnización por el despido.

Este tipo de contratos se pueden utilizar para reemplazar a un trabajador temporal o permanente, o para cubrir un puesto de trabajo temporal. Esto significa que el trabajador solo estará empleado por un periodo de tiempo específico y no tendrá derechos a los beneficios laborales como el sueldo mínimo, licencias pagadas, etc. Tampoco tendrá derechos a la indemnización por despido, a menos que el contrato especifique lo contrario.

¿Qué pasa si llevo 3 años de interino?

En España, ser interino significa trabajar con un contrato temporal por un período de tiempo determinado, el cual puede ser de uno a tres años. Si una persona trabaja como interino durante tres años, entonces hay una serie de cambios que se producen a partir del tercer año.

Una de las principales consecuencias de trabajar como interino durante 3 años es que el trabajador adquiere el derecho a la estabilidad en el empleo. Esto significa que el trabajador disfruta de una protección especial frente a la extinción del contrato por parte del empleador. Esto significa que, si el empleador desea extinguir el contrato, debe seguir un procedimiento determinado y notificarlo al trabajador con antelación.

Otra consecuencia de ser interino durante 3 años es que el trabajador adquiere el derecho a la antigüedad. Esto significa que el trabajador puede contar con una antigüedad reconocida y tendrá derecho a indemnizaciones más altas en caso de rescisión del contrato. Además, el trabajador tendrá derecho a una indemnización en caso de que el empleador decida despedir al trabajador sin motivo justificado.

Por último, el trabajador tendrá derecho a vacaciones retribuidas, así como a una indemnización proporcional a los días de vacaciones no disfrutados. Además, el trabajador tendrá derecho a una indemnización por años de servicio, que será proporcional al número de años de servicio prestados.

En resumen, si una persona trabaja como interino durante 3 años, disfrutará de una serie de derechos adicionales que no tendría si trabajara con un contrato temporal de menos de 3 años. Estos derechos incluyen la estabilidad en el empleo, el reconocimiento de la antigüedad, el derecho a vacaciones retribuidas y una indemnización proporcional por años de servicio.

¿Qué derechos tiene un funcionario interino?

Los funcionarios interinos tienen los mismos derechos y obligaciones que los funcionarios titulares. Esto significa que tienen derecho a la misma retribución, jornada laboral, vacaciones y descanso, tanto en el trabajo como en los descansos y en la jornada laboral. Asimismo, los funcionarios interinos tienen derecho a una seguridad social adecuada, a una estabilidad laboral y a un plan de formación profesional, a una jornada laboral máxima de 40 horas semanales, así como a un descanso semanal de 24 horas consecutivas.

Del mismo modo tienen derecho a una remuneración igual a la de los funcionarios titulares, demás, los funcionarios interinos tienen derecho a una formación profesional adaptada a sus necesidades, así como a la posibilidad de acceder a una estabilidad laboral, a una retribución adecuada de acuerdo con su nivel de responsabilidad y a un plan de formación profesional para favorecer su desarrollo profesional.