Trabajadora social/ integradora social

Durante dos años estuve haciendo prácticas en un Centro de Salud como Trabajadora Social, una de las principales cosas que aprendí durante el desarrollo de las mismas fue a trabajar desde el Modelo Integral y Centrado en la Persona, con lo cual dejando de lado sus carencias y centrándonos en sus capacidades. Por otro lado, junto con la profesional desarrollamos intervenciones tanto familiares, grupales como individuales sobre todo hacia personas dependientes. 
Con esta experiencia tan fructífera que me ofreció el grado durante tanto tiempo, desarrollé adecuadamente habilidades sociales como la escucha activa, la empatía, la asertividad, creando un clima de confianza para el establecimiento de la Relación de Ayuda y sobre todo trabajar desde un clima donde prime una comunicación asertiva. Me gustaría resalar que con éstas prácticas me di cuenta de la importancia de la comunicación, de una buena comunicación, puesto que trabajamos con personas y es el vehículo para establecer nuestra profesión

estuve un año como integradora social en un centro de salud mental, lo que supuso el primer contacto que tuve en el campo de lo social. Una de las principales cualidades profesionales que desarrollé durante ese año fue a controlar la frustración, a comprender que como profesional puedo tener muy clara la intervención pero que al 100% debe de estar adaptada hacia la persona con la que se trabaja, respetando sus tiempos y acompañando durante todo el proceso.