¿Qué derechos tengo por despido disciplinario?

¿Qué derechos tengo por despido disciplinario?

Si eres despedido de tu empleo, tienes derecho a recibir una indemnización por despido, según la Ley de Contrato de Trabajo. No obstante, existen excepciones en las que el despido no es considerado como tal y, por lo tanto, no estás indemnizado. Uno de estos casos es el despido disciplinario.

El despido disciplinario es un despido motivado por una falta cometida por el trabajador en el desempeño de su puesto de trabajo. Para que se pueda considerar como tal, debe haber un preaviso por escrito en el que se especifique la falta cometida y se le dé al trabajador la oportunidad de defenderse.

Si el despido es considerado como disciplinario, el trabajador no tiene derecho a indemnización por despido. No obstante, el despido debe ser proporcional a la falta cometida y no puede ser discriminatorio.

¿Que me tienen que pagar por un despido disciplinario?

Si has sido despedido de tu trabajo, puedes cobrar una indemnización por despido improcedente o por despido disciplinario. Antes de nada, tienes que saber si tu despido es procedente o improcedente, ya que de esto depende la cantidad de dinero que te corresponde cobrar. Si has sido despedido improcedente, la indemnización será de 33 días de salario por año de servicio, con un máximo de 24 mensualidades. Si has sido despedido disciplinario, la indemnización será de 20 días de salario por año de servicio, con un máximo de 12 mensualidades.

¿Qué es un despido procedente?
Un despido procedente es aquel motivado por una causa justificada, como puede ser la falta de adaptación del trabajador al puesto de trabajo o la realización de una actividad prohibida en el contrato. Para que un despido sea procedente, el empresario debe acreditar que ha seguido un procedimiento correcto y que ha notificado al trabajador, por escrito, las razones del despido.

¿Qué es un despido improcedente?
Un despido improcedente es aquel que se realiza sin causa justificada o cuando el procedimiento seguido por el empresario no es correcto. En este caso, el trabajador tiene derecho a cobrar una indemnización por despido improcedente.

¿Qué es un despido disciplinario?
Un despido disciplinario es aquel motivado por una falta cometida por el trabajador, como puede ser una falta de respeto hacia el jefe o el incumplimiento de una norma de la empresa. Para que un despido sea disciplinario, el empresario debe acreditar que ha seguido un procedimiento correcto y que ha notificado al trabajador, por escrito, las razones del despido.

¿Qué consecuencias tiene un despido disciplinario?

Después de que un empleado es despedido disciplinadamente, pueden surgir varias consecuencias legales y no legales. Las consecuencias legales pueden incluir una demanda por despido injustificado, mientras que las consecuencias no legales pueden incluir una mala reputación y dificultades para encontrar un nuevo empleo. Después de un despido disciplinario, el empleado puede presentar una demanda por despido injustificado si cree que el despido fue improcedente. Si el despido se considera improcedente, el empleado puede ser indemnizado por los daños y perjuicios sufridos. Además, el empleado puede ser reincorporado a su puesto de trabajo si el tribunal lo considera oportuno. Las consecuencias no legales de un despido disciplinario pueden ser igual de graves para el empleado. Un despido disciplinario puede dañar la reputación del empleado y hacer que le sea más difícil encontrar un nuevo empleo. Incluso si el empleado no es despedido, una acusación de falta grave puede perjudicar la reputación del empleado.

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