¿Qué es una enfermedad profesional y un ejemplo?

¿Qué es una enfermedad profesional y un ejemplo?

Una enfermedad profesional es una enfermedad que se adquiere a raíz de las condiciones de trabajo. Se produce por la exposición a determinados factores de riesgo en el lugar de trabajo, como el contacto con productos químicos, la inhalación de polvo o el ruido excesivo.

Algunos ejemplos de enfermedades profesionales son la silicosis, una enfermedad pulmonar causada por la inhalación de polvo de sílice; el asbestosis, una enfermedad pulmonar causada por la inhalación de fibras de asbesto; y el tinnitus, un trastorno auditivo causado por el ruido excesivo.

Enfermedades profesionales también pueden ser causadas por el estrés y la fatiga crónicos, que son comunes en ciertos trabajos, como los de enfermería y la policía.

Para evitar las enfermedades profesionales, es importante tomar precauciones adecuadas en el lugar de trabajo, como el uso de equipo de protección y el control de los niveles de ruido.

¿Cómo saber si es una enfermedad profesional?

En primer lugar, hay que tener en cuenta que una enfermedad profesional es una patología que se produce como consecuencia de la exposición a determinados agentes en el lugar de trabajo.

Por lo tanto, para saber si se trata de una enfermedad profesional, es importante que identifiques el agente al que te has expuesto en el trabajo.

Para ello, es necesario que consultes con un especialista en la materia, ya que él será quien mejor podrá identificar el agente y, en consecuencia, determinar si se trata de una enfermedad profesional.

¿Qué es una enfermedad profesional y menciona dos?

Una enfermedad profesional es una afección médica que se produce como consecuencia del trabajo realizado por una persona. Estas enfermedades pueden ser causadas por la exposición a determinadas sustancias químicas, agentes biológicos o a una mala postura durante el trabajo. Algunas de las enfermedades profesionales más comunes son el túnel carpiano, la bursitis y el síndrome del túnel del tarso.

Las enfermedades profesionales son un problema de salud pública debido a que pueden afectar la calidad de vida de las personas y reducir su capacidad para trabajar. Según el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST), en España se registraron un total de 48.370 enfermedades profesionales en el año 2017. De estas, el 61,9% fueron enfermedades musculoesqueléticas y el 20,8% enfermedades derivadas del contacto con agentes biológicos.

Para evitar el desarrollo de enfermedades profesionales, es importante tomar ciertas precauciones en el lugar de trabajo. Estas precauciones pueden incluir el uso de equipos de protección personal, el control de la exposición a sustancias peligrosas y la adopción de buenas prácticas laborales. En algunos casos, también puede ser necesario modificar el diseño del puesto de trabajo para reducir el riesgo de lesiones.

¿Cuáles son las enfermedades profesionales más comunes?

La prevención de las enfermedades profesionales es una prioridad para todos los trabajadores. Las enfermedades profesionales son aquellas que se producen o se agravan como consecuencia del trabajo. En la mayoría de los casos, son enfermedades de carácter crónico y muchas de ellas son incapacitantes. Según datos del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT), en España se diagnostican cada año unas 19.000 nuevas enfermedades profesionales, lo que supone una media de 52 al día. El 70% de estas enfermedades son patologías musculoesqueléticas, seguidas de las enfermedades derivadas del estrés laboral y las patologías derivadas de la exposición a agentes químicos. Las enfermedades profesionales más habituales son:

  • Lumbalgias y lumbociáticas: dolores en la zona baja de la espalda.
  • Tendinitis: inflamación de un tendón.
  • Epicondilitis: inflamación del codo.
  • Tunel del carpo: afección producida por la presión sobre el nervio mediano en la muñeca.
  • Hipertensión arterial: aumento de la presión sanguínea.
  • Mareos: sensación de inestabilidad y pérdida del equilibrio.
  • Ansiedad: sensación de miedo, angustia o inquietud.
  • Depresión: trastorno del estado de ánimo caracterizado por una tristeza profunda y duradera.
  • Trastornos del sueño: alteraciones del sueño que afectan a la calidad y/o cantidad del descanso.

Para evitar estas enfermedades es importante que los trabajadores adoptemos una postura correcta, hagamos ejercicio físico de forma regular y sigamos una dieta equilibrada. Asimismo, es fundamental que las empresas ofrezcan a sus trabajadores unas condiciones de trabajo seguras y adaptadas a sus necesidades, así como un ambiente laboral adecuado.

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